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El Bitcoin : esa gran trampa digital.

Bueno, para que no todo sea específicamente técnico, ni escribir exclusivamente sobre Hacking, hoy quería hacer unas reflexiones divulgativas sobre un fenómeno tan exponencialmente extendido como desconocido, incluso a niveles técnicos superiores: El Bitcoin.

Digo “desconocido” porque saber de la existencia de algo, o incluso más o menos saber cómo funciona, no es ni mucho menos conocerlo.

De modo que me gustaría poner blanco sobre negro, un post sobre esta moneda virtual, a partir de lo que se sabe (poco y general) para adentrarme en lo que, a mi parecer, es la gran trampa digito-crypto-económica de lo que va de siglo.

Todos sabemos que el kernel (digo… el corazón) del Bitcoin es un algoritmo altamente sofisticado y secreto que, juran y perjuran quienes lo conocen, es lo más justo, equitativo e inalterable del mundo, pues queda libre de injerencias de los Mercados, las especulaciones gubernamentales y demás animalario financiero internacional.

Hasta ahí la moto se vende bien. Pero, de verdad, profundicemos:

El Bitcoin no es real. Es la quintaesencia de lo digital como ejemplo de humo con apariencia de materia. Es decir, no se trata ya de que esa moneda (?) carezca de respaldo alguno en metal precioso, tal y como hasta hace bien poco tenían las divisas oficiales aunque ya tampoco. El problema es mucho mayor:

Si es un algoritmo lo que hay detrás y lo que determina su valor (que sólo parece subir, llegando a equivaler 1 Bitcoin a 900 dólares aproximadamente, ahí es nada) TODOS debemos saber que los algoritmos tienen detrás a uno o varios programadores que pueden alterar su valor (y me extrañaría que con el negociazo que se está generando en torno a él no lo estuvieran haciendo ya).

Eso para empezar. Al margen de ello, tenemos el problema de la seguridad. El Bitcoin puede ser, perfectamente, la moneda más insegura del mundo. Ríase usted del papel que imprimen en el Congo y al que llaman dinero. Los bitcoins no tienen regulación (a esto no me opongo, porque tengo alma de hacker) pero también carecen de la protección física de entidades solventes más o menos reguladas que respondan por nuestros depósitos en dicha divisa.

Tú no puedes tener, guardar o custodiar tus propios bitcoins. Por definición, son digitales, así que sueltas tu dinero de verdad y lo cambias por unos dígitos en la pantalla de tu PC que te devuelve un servidor de Tailandia “especializado” en minería de bitcoins… Toma ya…

Sólo hay que ver las noticias cada semana para enterarnos de que un nuevo portal web dedicado al intercambio de bitcoins ha caído, o ha sido atacado por hackers (muy socorrido esto último) y todos los ahorros en dicha moneda, que atesoraban los ciudadanos, se han perdido.

Claro que, bien podría ser que los chiringuitos no hayan sido atacados sino que, sencillamente, algún ingeniero informático con ambiciones, tras comprobar el volumen de bitcoins que su portal atesoraba o movía entre particulares, decida un día, echar el cierre, transformarlos en dinero contante y sonante y que le busquen…

Además de la seguridad, me gustaría que todo el que se interesa por este medio de inversión (que no me vendan que la gente lo usa como forma de pago digital, porque para eso no hace falta cambiar 900 euros por 1 bitcoin) se plantease algunas cuestiones de puro sentido común:

  • ¿Entiendo o tengo acceso al algoritmo que hay detrás de esta moneda digital en la que voy a meter mi dinero?
  • ¿Conozco o controlo quién intercede, mueve o custodia mi cuenta de bitcoins en la Red?
  • ¿Comprendo los mecanismos por los cuales estos pseudo-bancos digitales operan, guardan o me reembolsan mis bitcoins en dinero contante y sonante si lo solicito?
  • ¿Entiendo algo de criptoanálisis, o criptoseguridad, materias en las que se basa supuestamente todo este “invento”?

Si la respuesta a una o más preguntas de las anteriores es NO, simplemente, ese mundillo no es recomendable para ti. Y en mi humilde opinión, ni para ti ni para nadie.

Me suena el Bitcoin al invento perfecto: Aprovechamiento del cansancio generalizado y la falta de confianza que genera el mundo financiero en casi todos nosotros, para vendérsenos una panacea con los mismos mimbres pero disfrazada de independencia, anonimato y libertad (?)

Trae tu dinero aquí (aunque no sepas dónde es “aquí” ni qué es “esto”) que nosotros te garantizamos seguridad (mentira), solvencia (falso), una moneda alternativa (aún más falso) y, finalmente, independencia del Sistema Financiero Opresor… ¿Eihnnn? ¡Pero si lo que están creando es justamente eso! Otro sistema financiero aún más opaco, más desconocido, secreto y oculto que el monetareo.

Aquí no controla nada el ciudadano (el que suelta la pasta de verdad y la cambia por los bitcoins). No conoce quién está detrás, ni cómo se ha diseñado el invento, ni por qué desaparecen las webs en las que las cuentas de bitcoins están custodiadas… ¡Nada!.

Es otro juego de confianza que se nos pide, pero eso sí, después de que hayamos soltado el dinerito, que parece ser que es lo que importa. Aquí no se crea ni se genera riqueza. Esa no parece ser la prioridad. Aquí lo importante es que cambiemos nuestro dinero por cromos digitales que no custodia nadie (o lo que da más miedo, los custodia la Red…) y que son puro humo, porque no tienen materia. “Son un algoritmo” parecen repetir los defensores del Bitcoin, esperando que con eso esté ya dicho todo.

Conclusiones sobre el Bitcoin

  • El Bitcoin es un invento digital más, pensado, diseñado y programado para sacarnos los cuartos (léase, si se desea, con un tono satírico… lo tiene).
  • El Bitcoin es el nuevo timo de la estampita.
  • Nadie controla el algoritmo, excepto quienes lo crearon, lo que significa, precisamente, la mayor inseguridad, subjetividad e indefensión imaginable, porque quien controle ese algoritmo controla nuestro dinero.
  • Si dudas del actual Sistema Financiero, del dólar, el euro y todos sus mecanismos de trading que nadie entiende y que hacen que nuestro dinero desaparezca, el Bitcoin no es sólo más de lo mismo, es el paradigma de ese modelo.

Cuidado con esa moneda virtual. Es virtual, lo acepto, (y con eso casi está dicho todo…) pero desde luego NO es una moneda.

Una cosa más a modo de Postdata: Todo lo que sea quitar material de tus manos y conocimiento de tu mente es malo. Y el bitcoin se basa en quitar dinero real de tus manos y que no conozcas cómo funciona y opera significa que no tienes ese conocimiento en tu mente.

Alquimista

Hackeando la vida de 8 a 14 horas. Escribo con pseudónimo porque mucho de lo que se escribe debe ser anónimo en materia de seguridad y hacking. Creo en un conocimiento libre, en un pensamiento libre, en un software libre y, en suma, en una mente libre. Década y media de experiencia en materia de hacking y seguridad informática y no informática.

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